HASTA LA NARICES DE CORREOS

En primer lugar, pongo hasta la narices por lo poner hasta otro sitio, porque estos de correos la verdad es que es un servicio tercermundista.
En lo que va de año me perdieron ya 3 envíos que recibía desde Gijón... no sólo a mi no me llegó si no que el amigo que me los mandaba ( eran películas) tampoco los recibió y tubo que volver a mandarme otro paquete... esto, a parte de las increibles tardanzas, pasa a menudo.
El otro día, de repente, me sentí aterrorizado porque estoy mandando el corto GOTAS a festivales y pensé que igual estoy tan tranquilo y el corto no llega. Bueno, debo decir que hice un seguimiento y sí, había llegado a todos.
La actitud que tienen los funcionarios es increible también... no es inusual que te estén atendiendo y hablando al mismo tiempo con su compañeros de recetas de cocina y demás o, como una vez me pasó a mi, chupando de una botella de agua como si no hubieran bebido en la vida. ¿ Consentirían eso en una empresa privada que trabajara de cara al público...? No lo creo.
En fin, ya la gota que colma el vaso es que, hoy mismo, me meten una factura de la luz equivocada en mi buzón... era de un almacén y ascenía a 700 €... así que podéis imagináos el vuelco que me dió el corazón cuando la vi y el mal rato que pasé hasta aclararlo todo.
Recuerdo, hace muchos años, en Gijón una noticia que salió en el periódico sobre un señor que mandó los ingredientes de una fabada por correos y, como esta no acababa de llegar a su destino, pues hizo lo posible para que se la mandaran de vuelta. Cuando por fin se la devolvieron, vió que los ingredientes estaban abiertos. Como buen asturiano que no aguanta tonterias a nadie, fue a correos y les tiró la fabada en la oficina. Recuerdo ver en el diario El Correo de ´Gijón todas las fabas por el suelo... hizo muy bien... si me pasa a mi cojo una morcilla y se la meto por la cabeza a un funcionario... eso bien lo sabe dios.
Desde luego, con la gente que hay al paro y que tengan a esa gente impresentable dsde el año la polka... da que pensar.